iZombie del cómic a la pantalla

Gracias a Birraseries asistimos a la presentación del primer episodio de iZombie que se estrena en AXN el lunes 23 de mayo a las 23:15.

La serie está basada en el cómic del mismo nombre pero el parecido con éste poco tiene que ver. Los que asistimos al estreno tuvimos la suerte de adquirir el primer número del cómic que no está disponible en España. AXN regaló una copia a cada uno de los presentes y es por ello por lo que podemos comparar ambas versiones. A algunos les puede molestar que una adaptación se tome libertades a la hora de representar al original, sin embargo en el caso de iZombie es tan distinto todo que ambas obras se pueden disfrutar por separado.

La serie se inspira más en Veronica Mars, algo comprensible ya que es de su mismo creador y sigue una trama de serie procedimental con investigaciones policiales, como en su día hiciera Veronica. Aquí no tenemos a una adolescente que resuelve crímenes mientras va al instituto, sino a una chica zombi que compagina su trabajo de forense con el de asesora policial. Liv tenía una vida normal pero una fiesta la cambió por completo, de verdad. La convirtió en zombi y todos sus sueños se fueron al traste, su trabajo, su prometido, su familia…ahora es más asocial, reprimida y ha acabado trabajando en la morgue porque era el paso lógico y le permite tener acceso a cerebros medianamente frescos.  Liv, su jefe Ravi y el detective Bavineaux acabaran trabajando juntos resolviendo asesinatos gracias a las dotes psíquicas de Liv (aunque en realidad sus poderes vienen de los recuerdos de las víctimas que obtiene cuando se come sus cerebros).

En el cómic Liv es Gwen y tras leer el primer número ni Ravi, ni el detective o el antiguo prometido aparecen en las viñetas. Se trata de una historia completamente distinta donde sí aparecen otros seres sobrenaturales como hombres lobos, vampiros y fantasmas. Sin embargo el eje central sí que sigue siendo el mismo. Gwen también es una chica que tras convertirse en zombi ha tenido que hacer borrón y cuenta nueva y acabar en un trabajo más acorde con su nueva no vida, ahora es enterradora. Ella también obtiene los recuerdos de aquellos de los que prueba sus cerebros y a veces se encuentra con víctimas de asesinatos que tienen sed de venganza, algo a lo que ella no podrá resistirse. Ambas historias aunque muy distintas son altamente divertidas y os animamos a que les echéis un ojo.

Veronica Mars no quiere ir a su reunión de instituto y yo tampoco

Veronica Mars era una outcast en el intituto. Bueno, en realidad al principio era una chica guay. Era la hija del Sherif y eso por lo visto daba puntos. Tenía de novio a Duncan Kane de los Kane de Neptune, es decir una de las familias más ricas de Los Angeles y como mejor amiga a su hermana, Lily Kane.

Todo su estatus estudiantil cayó por los suelos cuando durante la investigación del asesinato de Lily, el Sherif Keith Mars empezó a sospechar de los propios padres. A partir de ese momento Veronica Mars pasó de ser una de las chicas populares del insti a una de las renegadas. Pero tras la caída, Veronica Mars se alzó más fuerte que nadie y junto a su padre comenzó a trabajar en su agencia de investigación privada, la excusa perfecta par planear su venganza. Descubrir al asesino de Lily Kane y limpiar el nombre de su padre.

Así que el reencuentro con los estudiantes de Neptune no es algo que Veronica esté deseando que pase. Claro, que como ella es una gran investigadora, adicta a la adrenalina y a los casos sin resolver y ya sea de paso a Logan Echols, acaba asistiendo. Wallace y Mac (que se ha puesto de un buenorro que asusta) están emocionados por acudir. Emocionados desde una perspectiva en la que ya pasan de lo que pensarán el resto de sus compañeros sobre ellos mismos, ellos van a ayudar a Veronica y a tener un poco de juerga.

Y qué queréis que os diga, yo entiendo a Veronica. No entiendo ese afán en reunirse con antiguos compañeros de clase al cabo de los 10 o 20 años porque si durante ese tiempo no habéis intentado contactar es que no tenéis el más mínimo interés. Existe Facebook, ahora si quieres cotillear si tu archienemiga está  más gorda, preñada o casada, puedes descubrirlo a golpe de click y no tienes que aguantar mantener una conversación incómoda cara a cara. A los compañeros de clase que no ves, es porque no quieres o ellos no quieren. Si es en el segundo caso, que les den, ¿vas a invertir tu tiempo en arreglarte y salir a ver a alguien que no tiene el más mínimo interés en ti?

Pero ¿y qué pasa con tus mejores amigos? Íbamos a todos sitios juntas, nos llámabamos a diario, celebrábamos nuestros cumpleaños, eramos conocidas por ser las mejores pero que las mejores amigas. Vale, pues si a esa amiga o amigo no lo has vuelto a ver desde que acabara el insti es por una simple razón: tan amigos no eráis. Y es que el colegio es como un Gran Hermano (el programa de la Milá), te tienen encerrado en un recinto con gente de tu misma edad con la que posiblemente no tengas nada qué ver. Pero no tienes dónde elegir, o te haces amiga de una o de otra. Pero cuando el insti acaba, cada uno toma caminos diferentes y es entonces cuando te ves acudiendo a visionados de cine basura, mientras cotilleas el Facebook a tu «mejor amiga» y la ves en la Fashion Week de Madrid. Esa relación no iba a acabar bien. Si verdaderamente esa amistad era real, o al menos, se ha mantenido con el tiempo, seguramente ya os véis con asiduidad como para tener que pasar por el mal trago de regresar al insti.

Pero claro, está esa opción. La de alardear. La de decir al mundo (al mundo conformado por los compañeros de insti) de que ahora vales mucho más, que estás más buena, más guapa, que tienes un trabajo molón, eres rica, que tienes un novio modelo…pero hay pocas posibilidades de que estas cosas te hayan pasado. Hay más posibilidades de que cuando se empiece a hablar de una reunión de instituto, a ti te haya dejado tu novio, que sigas sin trabajo y que vivas con tus padres (y para nada es algo autobiográfico, para nada he dicho).

Yo no he digievolucionado como la Kristen, pero engaño con los filtros de instagram

Pero si afortunadamente eres de esos que ha digievolucionado, te importará una mierda lo que piensen de ti tus compañeros. Porque con la edad esas cosas del instituto o se superan o se olvidan. Si te trataron como una mierda ¿en serio quieres regresar a verles las caras? Que les den, tú no estás para perder el tiempo con sonrisas falsas y promesas de «a ver si quedamos» «pásate por mi casa» porque sabes que nunca se van a cumplir.

Así que yo y Veronica decimos que no a las reuniones de instituto, salvo la excepción de que haya aparecido alguien muerto. Eso lo tenemos que investigar.

Fuente imágenes: http://screencapped.net/veronicamars/