
Una cosa de la que me he dado cuenta viendo Mighty Morphin Power Rangers: Ayer, hoy y siempre es que nunca he sido muy fan de los Power Rangers. Sí, yo también siento que estoy defraudando al mundo y a la mini audiencia de este blog.
Siempre pensé que me pilló mayor pero creo que eso es casi imposible. ¿Cuántos años tengo? Lo cierto es que quizá me desenganché en algún momento y aunque yo fui creciendo, la serie continuó sin mí. Creo que la serie no llegaba a conectar conmigo porque quitando las escenas de las peleas el resto era demasiado infantil y era una mezcla extraña. ¿Puede que fuese lo que más se quedaba de la serie? Las escenas de lucha. Recuerdo que el hijo de la señora de la limpieza de mi bloque me estaba «pegando» un día (era un mico, por eso pongo pegar entre comillas porque le miré como «pero qué haces si no tienes fuerza ni na) y le pregunté que si veía los Power Rangers y juro que me respondió como si lo hubiesen programado «Sí, todas las mañanas a las 8». A ese niño la serie no le hacía bien.
Aunque la serie no me terminó de enganchar toda su estética y el fenómeno cultural me encanta. Tengo un vestido de la Pink Power Ranger porque obviamente sí que era fan de Amy Jo Johnson y su Kimberly. Además siempre he querido los muñecos que creo recordar que mi primo sí tenía.

Entonces al no ser muy fan de la serie original no podía esperar que la nueva película que suponía el reencuentro de algunos de los actores originales (no perdono lo de no contar con Amy) me fuese a entusiasmar pero lo cierto es que esperaba algo más. ¿Qué target tenía esta peli de Netflix? Para los adultos fans de la serie original el efecto de la nostalgia no lo es todo y tener una historia y escenas infantiloides no cuadra para nada con la edad que ya tenemos. Quizá la trama encajaría más con un público nuevo y juvenil (tirando a infantil) pero ese público no creo que haya mostrado ningún interés, a no ser que los padres millennial les hayan forzado a ver la peli en familia.
La verdad es que el momento dramático con el que comienza la historia es algo interesante y que se relaciona con la realidad de los actores (no quiero desvelar mucho por los spoilers) pero no esperaba algo así en una peli de Power Rangers. Los nuevos actores dejan mucho que desear y los clásicos son los que salvan la historia.
Pero poco que recomendar de una película en la que la escena que más nos ha gustado es la de créditos que recicla un clip de la serie original para rendir homenaje a dos miembros que fallecieron.