Secuestrando a la Señorita Tingle es una de esas películas de los late nineties que tanto me gustan. A ver, casi me gusta más el concepto que el resultado (secuestrar al profesor que te tiene manía mola como fantasía teen pero luego hay que llenar dos horas de metraje y la historia pierde bastante gas…), aunque lo cierto es que tiene suficientes elementos de interés como para que guarde un buen recuerdo de ella, a saber:
Para empezar, tenemos a mi querida Katie Holmes protagonizando su propia peli teenager (no hizo por su carrera lo que tal vez esperaba), para continuar al frente del proyecto está Kevin Williamson dirigiendo por primera (y última) vez el guión que él mismo escribió; y luego tenemos esa energía juvenil y de director debutante que inundan el metraje, valgan como ejemplo esas secuencias tan locas con una ballesta de por medio (todo el mundo se volvió loco con Jennifer Lawrence y su arco y sus flechas pero… ¿¿y las ballestas?? ¡Justicia pop para las ballestas!).

Estrenada el 20 de agosto de 1999, justo antes de que todos los ordenadores del mundo se rebelaran contra la humanidad (¿os acordáis del supuesto Efecto 2000? ¡Vaya timo!), la peli es una comedia negra escrita y dirigida por Williamson y protagonizada por nuestra Joey Potter del alma, Marisa Coughlan (la prota de la fallida Wasteland), Barry Watson (que por aquel entonces era una property muy hot en Siete en el paraíso), Molly Ringwald en un super-cameo, Jeffrey Tambor y la mitiquísima Helen Mirren.
Pequeño making of debajo con Williamson diciendo que iba a ser su última peli teen por algún tiempo -he was right- y Molly Ringwald diciendo lo mucho que le recordaba Katie Holmes a sí misma a su edad (dura menos de 8 minutos y es bastante disfrutable):
Volviendo al tema del reparto, repetid los dos últimos nombres conmigo: Jeffrey Tambor y Helen Mirren. Yo no sé vosotros pero en mi caso esta fue la primera película en la que vi a Helen Mirren (tenía 19 años cuando vi Tingle en el cine, no podéis culparme) con lo que puedo decir y voy a decir que Dimension Films introdujo a Helen Mirren en el cine del siglo XXI.
El argumento: la profesora Ellen Tingle, un auténtico monstruo odiada por sus alumnos y por sus propios compañeros de trabajo (quienes la consideran poco menos que una marciana; no en vano en su maletín lleva grabadas las iniciales de su nombre: E.T., jejeje), le tiene una manía que flipas a Katie Holmes (aquí una versión dulcificada de Joey Potter, o sea, un personaje mucho menos interesante), y cuando la pilla copiando-but-not-really en un examen, ¡ZÁS!, tiene la ocasión perfecta para suspenderla y fastidiarle la beca que la iba a sacar de la cochambre (la madre de Joey le pega a la botella y no tienen un duro, viven en la típica caravana infame donde vive la white trash americana en las películas y, me temo, en buena parte de la realidad).
Debajo podéis ver unas declaraciones de Helen Mirren sobre el doble trabajo de Kevin Williamson como director y escritor de la película (a mí me ha dado un gustirrinín especial escuchar a una actriz tan grande pronunciar las palabras Dawson’s Creek, no e escondo):
Recuperando la sinopsis: El personaje de Katie Holmes es una FIGHTER y no piensa aceptar su inmerecido suspenso así como así y decide, con nocturnidad y alevosía, presentarse en casa de la Señorita Tingle. A ver, va en son de paz, en plan «vamos a hablarlo», que le revise la nota, que todo ha sido un error, no eres tú soy yo… y aquello se va liando, se va liando, y acaban secuestrando a la pobre mujer en su propia casa, jajajaja! ¡Que revises la nota ya, Helen Mirren! Jajajaja. Cine teen, you gotta love it.
La verdad es que la peli en su momento no se comió un colín, dejando tocadas unas cuantas carreras: la deliciosa Marisa Coughlan, que literalmente le roba el film a Katie Holmes, no volvió a asomar el careto en ninguna producción conocida, teen o no teen; Williamson no ha vuelto a dirigir en su vida, Barry Watson se puso a comer donuts y hasta luego Lucas, y Katie Holmes pues… ya sabemos.
La única que le sacó provecho al Proyecto Tingle fue Helen Mirren, la más lista de la clase. Y la verdad es que ella es la película, es increíble como puede comandar toda la acción del film desde una cama, a la que está atada la mayor parte del tiempo. Katie Holmes, el chico que le mola y su mejor amiga imitando a la niña del Exorcista (lo borda) están muy simpáticos, pero es Helen Mirren la que corta el bacalao.
Con una actriz peor esto hubiera sido aburridísimo y ridículo (a ver, la situación ridícula es, pero te crees que Tingle realmente ODIA al personaje de Katie Holmes y tiene algo personal contra ella gracias a que la actriz inglesa se toma en serio su papel y no trata al film como un producto de serie B… que es lo que es). Para el papel de Ms. Tingle se pensó en otras actrices de peso como Sigourney Weaver, Glenn Close, Meryl Streep, Sally Field o Gillian Anderson (¡!). Alicia Silverstone sonó como posible protagonista.
Ya hablamos de la Señorita Tingle en este post
Como curiosidades, sabed que originalmente el film iba a llamarse Killing Mrs. Tingle pero se cambió tras la masacre del instituto Columbine (en inglés por “Teaching” y en español por “Secuestrando”, para que andar con misterios…); que Michelle Williams, o sea, Jen Lindley, tiene una tv-movie muy similar en la que secuestran a otro profesor pero es de tono mucho más chungo (y está basada en un libro de la autora de Sé lo que hicisteis el último verano)…

… que el pueblo donde se monta todo el cacao se llama Grandsboro (Woodsboro anyone?), que el material promocional del film hubo de ser revisado varias veces para evitar polémicas y malentendidas tras la polémica ya explicada (todo lo centraron en la «manzana de la tentación» que aparece brevemente en el film); y que el director del insti se llama… Sr. Potter:
TODO ESTÁ CONECTADO
En definitiva, una cinta muy divertida, con chispazos de originalidad aquí y allá pero que no deja de ser un peliculilla menor incluso dentro de la fiebre teen que hubo a finales de los 90 en el cine comercial americano propiciada, precisamente, por el responsable de Secuestrando la Señorita Tingle.
Más remembers que nos hemos marcado en Brenda Forever: