Toda serie teen tiene su propio Pacey Witter

Os quiero hablar de Pacey Witter. Mi adolescente televisivo favorito. Aunque en las últimas temporadas de Dawson Crece, Pacey ya no era un adolescente, sino un joven adulto, término que quiere decir que aunque por edad eres un adulto te sigues comportando como un niñato de 15 años la mayoría del tiempo.

Pacey era el payaso de la clase, el que estaba siempre a la sombra de su más responsable y sensato mejor amigo Dawson Leery. A pesar del odio que se tiene a Dawson (y sé que muchos le odiáis), yo lo quiero como uno de mi familia, porque el chaval era un tipo normal, un pardillo con sueños de grandeza, un ingenuo de la vida que se cree que sabe más que nadie, que vive sus problemas como si fueran traumas épicos, es decir, es un adolescente de manual. Pero ni que decir tiene, que mi corazón se lo llevó Pacey. Puede ser que eso que dicen que a las mujeres se las ganas con hacerlas reír, sea verdad. En la primera temporada de la serie Pacey no era para nada un sex symbol -recordemos ese pelado a lo Julio César- así que el enamoramiento de la sociedad teen internacional hacia Pacey Witter/Josh Jackson tenía que venir de otro lado, la genial personalidad del señor Witter.

Como buen payaso de la clase, Pacey también tenía su corazoncito, sus problemas y sus inseguridades, de ahí tanto chiste y guasa, su mecanismo de defensa para no demostrar que en verdad tenía un complejo de inferioridad alucinante y que se sentía una mierda que nunca llegaría a ningún sitio. Ya así, más interesante que Dawson era, porque el futuro Spielberg no se guardaba nada, te lo decía todo del tirón, sus emociones, sentimientos, deseos pero claro ir descubriendo facetas de un personaje poco a poco, es mucho más interesante.

Por estos motivos Pacey se ha convertido en todo un referente televisivo teen y todavía muchas soñamos con que Pacey Witter aparezca en nuestras vidas (como si existiese de verdad, sí, estamos locas). Pacey es divertido, es irresponsable -¡se lió con su profesora!- se le dan fatal los estudios, tiene problemas con su familia, es un pardillo en el insti, es un gran amigo -salvo ese momento de me lío con la ex de mi mejor amigo- como novio es todo un caballero, protector, cariñoso y un ciego del amor -olvidemos que en la cuarta temporada se peleaba con Joey a cada segundo sin motivo aparente- en general era un novio ideal, no era perfecto lo que lo hacía más realista.

Y claro, echamos de menos a Pacey Witter. Pero lo que las series teen nos quitan cuando se cancelan, nos la devuelve otra con una generación nueva de Pacey Witters.

En The OC teníamos a Seth Cohen.

Seth estaba a la sombra de Ryan el rebelde llegado a Newport de Chino porque la familia Cohen era una familia adinerada pero con un corazón de oror y deciden acoger en casa a Ryan, un pequeño delincuente que en el fondo tiene muy buen corazón. A pesar de que Ryan se supone que es un desmadrado, lo peorcito del barrio, la verdad es que el chaval es de lo más responsable y en los líos que se ha metido ha sido por ayudar a familia o amigos. Es entonces, el responsable, el serio, el maduro, mientras Seth sólo tiene pajaritos en la cabeza leyendo sus cómics, jugando a videojuegos y soñando con su mujer ideal Summer Roberts. El parecido aquí con Pacey viene por el rol que tiene dentro de la serie como sidekick del protagonista y porque aquí también nos encontramos con el chico divertido aunque más exagerado.

En Greek teníamos a Cappie.

Cappie directamente es Pacey. Físicamente hasta se guarda cierto parecido con Joshua Jackson. Cappie es cómo sería Pacey si hubiese ido ala Universidad y no hubiese madurado nada después del instituto. Cappie es un fiestero, un desastre en los estudios no porque no sea inteligente sino porque no quiere graduarse, no quiere madurar porque el futuro le da miedo. Odia las responsabilidades, odia el pijerío, a los ricos y sólo quiere divertirse. Pero la Universidad está para aprender, o eso dicen. Cappie quiere estar allí eternamente, quiere ser un eterno Peter Pan.

Su personalidad es lo que le impide ser feliz junto a Casey Cartwright, la Joey Potter particular de Greek, una chica responsable, de familia bien y que tiene muchas metas en su vida que cumplir. Ella tiene las cosas claras, sabe lo que quiere en el futuro y quiere que ese futuro llegue, quiere madurar y seguir adelante, algo a lo que Cappie no está dispuesto. Pero como en el caso de Pacey, en el amor, Cappie también es un soñador, él cree que sus diferencias no impedirán que triunfe el amor que siente por Casey y a pesar de todos sus ligues, juergas, borracheras y chistes, lo que verdaderamente quiere es recuperar el amor de su vida.

En Teen Wolf tenemos a Stiles Stilinski.

En este caso es que el padre de Stiles es el sherif del pueblo, igual que el de Pacey. En ambas relaciones paterno-filial, hay ciertas tensiones aunque el padre de Stiles gana en simpatía porque su hijo le pone de los nervios -es lo que tiene vivir con un chaval hiperactivo- pero le importa verdaderamente su hijo y lo quiere, algo que no podemos decir del padre de Pacey. Stiles es el payaso de la clase, a la sombra de su amigo Scott con el que tiene una relación muy Pacey-Dawson pero a Stiles las mujeres no se le dan tan bien como a Pacey, aquí no hay rollo con profesoras pero sí una chica con la que está obsesionado, Lydia. Esta pareja formada por Stiles y Lydia es muy parecida a la mantenida en la primera temporada de The OC por Seth y Summer, donde Summer la chica rica y pija ignora por completo a Seth.